Una Declaración de Interés Comunitario es un conjunto de documentos técnicos necesarios para desarrollar actividades industriales, productivas y de servicios o terciarias, que permite ejecutar obras, edificaciones o instalaciones en parcelas que se localizan en suelo no urbanizable.
Según regula la Ley 5/2014 de Ordenación del territorio, Urbanismo y Paisaje de la Comunidad Valenciana, existen multitud de casos que pueden requerir de una solicitud de uso y aprovechamiento en el medio rural como pueden ser una granja, un hotel, un restaurante, un campamento de turismo, una bodega, un vivero, un polideportivo, un campo de golf, una explotación minera, una planta para el tratamiento, valorización, depósito y eliminación de residuos, un ecoparque, etc.
Una vez se tenga claro cuál va a ser el emplazamiento de la instalación puede comenzarse a redactar la DIC, la cual presenta cierta complejidad debido a la gran cantidad de documentación necesaria. Esta puede resumirse en dos partes:
- El Proyecto Urbanístico, que debe contener una descripción de la actividad y las instalaciones, la justificación de la necesidad de emplazamiento en el medio rural, los planos de información y de ordenación, así como la descripción de accesos a la actividad y obras necesarias, entre otros.
- El Estudio de Integración Paisajística, cuyo contenido se adaptará al tipo de actuación propuesta y al paisaje donde se ubica.
Por otro lado, en caso de que la actuación requiera someterse a procedimiento de evaluación ambiental, deberá solicitarse la determinación del alcance de impacto ambiental.
El plazo de tramitación de una DIC suele ser bastante largo ya que intervienen diferentes organismos públicos que deben emitir un informe favorable como Ayuntamientos, Confederaciones Hidrográficas, Unidad de Carreteras de la Diputación, etc. Por ello, es importante confiar la redacción y tramitación de Declaraciones de Interés Comunitario a una empresa con experiencia como CA&CCA que realice dichos trámites con la mayor rapidez posible.